Que no se pierda la costumbre!

Se acerca la Navidad, y lejos de las connotaciones que la festividad contenga nosotros tenemos un deseo para todos: un mundo cargado de amor. Y puestos "en faena", hemos escrito una postal navideña, pero este año va a ser más especial. No la vamos a guardar en la mochila, ni mucho menos en la bandeja, tampoco la vamos a llevar en la mano a casa...este año la vamos a enviar por correo.
Y que mejor destinatario que nuestras propias familias, a quien mejor desearle unos días felices y llenos de armonía que a ellos.

Pues sí, así ha sido, y aunque hemos tenido que pedirle a nuestro amigo Mufi un poco de ayuda para que nos trajera un buzón de Goguilán, hemos podido hay mandar nuestra carta (aunque algunos/as aún esperan a que se seque la purpurina).

Que bonito es todo cuando tiene un poquito de inocencia y de magia. Aquí las fotos del momento.

PD: con esta actividad, hemos trabajado muchos aspectos, tanto de escritura como de conocimiento social y de las tradiciones.